jodida y radiante

Y si todo se confabula, será por algo, ¿no? Las historias que quiero escuchar son de hombres que suben montañas, no de montañas que se mueven. Ellos trepan entre vertientes y fuertes desniveles, juegan a volar y otras son ángeles

Si quieres perderte, sólo te encontrarás

y a lo lejos

la sombra de lo que eras

Sólo los conoces en su hábitat, así que si crees distinguir en la ciudad a algún montañero

toma su mano y déjale en casa

es la única forma fehaciente de saberlo

Camarero dale sal a esto que el ambiente esta frío

y prematuramente repetitivo

Pudiendo ser feliz en cualquier otro sitio...

elegiste este,

¿lo eres?

No te retuerzas en la silla

resume, nada tiene tan jodida importancia

y punto

y puñetazo

Veo bueyes cayendo por el precipicio ¿son bueyes?

Otras indios y plumas

El hombre fue hombre cuando incorporó la palabra porrrqueee al vocabulario

y libre al dejar de usarla

Montañas

los hombres

Sonaba el Lichis por la radio

en el forzoso acto del aparcamiento le golpeó

era rojo y nuevo

ella delgada y rubia

él, el dueño, risueño

pasaron cosas, quizá follaron, quizá no

La realidad es ficción a la enésima potencia

Le llamaban el venao

se dislocó un brazo

jaque mate

perdió su casa

y con la hucha de su hija se marchó a la estafeta de lotería

Ser niña, eligió, ruvieja, así lo decía ella

y quedarse con esa parte de la historia

insert coin, continue

y a otra cosa mariposa

el mundo es grande, mucho

comparado, el dedo gordo mu pequeño

Iker respeta a Annapurna

estaba enfadado, no daba la bienvenida

la tercera expedición subvenciona con ella al alcance de la mano

y era imposible dejar de contemplarla, majestuosa

reina de otros reyes en un valle de otro tiempo,

pero esta vez desprendiéndose de un manto blanco

él no la espera

y la montaña pletórica saluda al viento, al sol y a un hombre

Si viera la humanidad en detalle, quizá fuera cierto que se mueve y se sumerge bajo las aguas

pero Iker en su cima la acaricia y grita “guapa”